Top 5: Telenovelas discográficas

miércoles, 1 de agosto de 2012 12:57 By N.

Leyendo algunos casos de idas y venidas de los músicos con sus compañías discográficas no solo es increíble que todavía les quede tiempo (y especialmente ganas) de componer, grabar y tocar en vivo, sino que también es increíble pensar que las discográficas se quejen de la baja en las ventas cuando hacen la clase de estupideces que podrán leer a continuación en nuestros cinco casos preferidos de telenovelas discográficas.

05. Frank Ocean - Nostalgia, Ultra
Frank Ocean es tal vez el mas reciente de los tantos casos de artistas que son ignorados olímpicamente por sus compañías discográficas. Después de un tiempo grabando e intentando que Island/Def Jam, su compañía, le prestara atención, Frank se quemó y subió todas sus grabaciones a internet con el título Nostalgia, Ultra para que las descargaran libremente, en Twitter el artista comentó:
"i. did. this. not ISLAND DEF JAM. that's why you see no label logo on the artwork that I DID. guess its my fault for trusting my dumbass lawyer and signing my career over to a failing company. fuck Def Jam & any company that goes the length of signing a kid with dreams & talent w/ no intention of following through. fuck em. now back to my day."

El resultado: uno de los mejores discos de los últimos años y Def Jam no va a ver un peso del mismo.


04. Sparklehorse & Danger Mouse - Dark Night of the Soul
La colaboración entre Sparklehorse y el productor Danger Mouse es el ejemplo perfecto de lo que resulta de la estupidez burocrática de las discográficas, el disco se grabó y produjo en 2008 pero el lanzamiento se retrasó por desacuerdos entre las disqueras de Sparklehorse y Danger Mouse y otras subtramas legales. Cuando finalmente salió el disco, en 2011, Mark Linkous, el cantante de Sparklehorse ya se había suicidado hace casi un año.

El resultado: Un lanzamiento regular convertido en un disco póstumo.


03. The Wrens - Secaucus
Los Wrens no fueron victimas de la burocracia, sino mas bien de la codicia de las disqueras. Cuando estaban en medio de la gira de promocion de Secaucus, su disco de 1996, la disquera con la que tenían contrato fue adquirida por un nuevo dueño, el cual le ofreció a la banda un contrato por un millón de dólares para grabar un nuevo álbum siempre y cuando cambiaran e hicieran canciones mas "aptas para la radio". La banda dijo que no a lo que la disquera dejo de financiar la promoción del disco.

El resultado: The Wrens, entre batallas legales, demoraría 7 años para grabar The Meadowlands el sucesor de Secaucus. La disquera despues cambiaría de nombre a Wind-Up Records y tendría exito con bandas horrendas como Creed.


02. Wilco - Yankee Hotel Foxtrot
Tal vez el poster child de los líos con discográficas es Yankee Hotel Foxtrot. Frustrados por el cambio de dirección musical de la banda, Reprise decidió romper el contrato con la banda a cambio de darles gratuitamente los derechos del disco ya grabado. La banda subió el disco a internet y ganó la atención de otras compañías discográficas, de las cuales eligieron Nonesuch para editar el disco que terminó siendo disco de oro. Lo curioso es que Reprise y Nonesuch pertenecen a la misma compañía madre, AOL Time Warner.

El resultado: a Reprise se le escapó la tortuga y la compañía madre pagó dos veces por el mismo disco.


01. Happy Mondays - Yes! Please
Si el proceso de grabación y lanzamiento del disco de Wilco tuvo de todo un poco, el de los Happy Mondays fue una obra surrealista. Despues del exitoso Pills 'n' Thrills and Bellyaches, y para alejar a los miembros de la banda de sus adicciones a la heroína y otras sustancias, no tuvieron mejor idea que mandar al grupo a un país en el que supuestamente no había esta sustancia: Barbados. ¿El resultado? Los miembros de la banda se engancharon con la droga que había en la isla (el Crack) y no solo terminaron grabando poco y nada, sino que tambien empeñaron todo lo que tenían (incluídos los instrumentos y el equipo de grabación) para financiar la adicción.

El resultado: un disco de mierda y Factory Records en quiebra.

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